Gracias a estos consejos podrás elegir la carne perfecta para tu restaurante, asador, bar o carnicería para sorprender con la calidad a todos tus clientes, viejos y nuevos.
El primer paso para preparar una receta perfecta es elegir las mejores materias primas. Elegir la carne adecuada para su plato es la mejor manera de garantizar un gran resultado. Pero, ¿cuáles son las reglas para elegir y comprar carne?
No son muchos pero todos son importantes, empezando por elegir a un mayorista de carne de confianza que te ayude a orientarte en un mundo complejo como el de las materias primas de origen animal. Con nuestros consejos, elegir la mejor carne será muy sencillo y tu cocina dará un salto decisivo en calidad.
Elegir carne de calidad: preste atención al origen
Son muchos los factores que hacen de la carne una carne de calidad. Muchos de estos factores se refieren a la calidad de vida del animal: el tipo de cría, la dieta y el tipo de vida que llevan los animales se encuentran entre los indicadores de calidad más importantes.
Pero también está el procesamiento, la maduración y sobre todo el manejo y respeto de la cadena de frío. Habla con tu proveedor de carne, quien podrá contarte en detalle sobre el origen y características de la carne y el corte que deseas comprar. También acostúmbrate a leer las etiquetas si compras carne procedentes de otras regiones de Europa o del mundo. Toma decisiones informándote. La buena carne comienza con un ganado cuidadoso y saludable.
Mira siempre el color
El color de la carne es un muy buen indicador de su calidad. Busca siempre carnes de color intenso, vivo y brillante, estas son las características de la carne fresca.
Por otro lado, una carne con un color oscuro y apagado, es signo de un corte de carne que ha estado en porciones durante algún tiempo. Tan importante como el color de la carne es el color de la grasa de la carne, que debe ser de color blanco perla o amarillento y siempre brillante. Una grasa rosada o rojiza cuenta la historia de una carne que no ha sido procesada con cuidado.
La textura de la carne
A medida que continúe observando la carne que está comprando, es importante evaluar su consistencia.
La carne para hostelería y carnicerías no debe estar demasiado húmeda ni excesivamente seca, señal de que la carne se ha almacenado mal. La temperatura de almacenamiento es muy importante para mantener el sabor, la consistencia y sobre todo para comer carne sana y segura. Sobre todo si tu intención es cocinarla cruda, preparando carpaccio o tartar.
Para comprobar que la carne tiene la consistencia adecuada, presione ligeramente con el dedo sobre la pulpa: si la carne está fresca, la huella que haga su dedo se reagrupará inmediatamente, si el agujero permanece, significa que la carne ha perdido su elasticidad.
La maduración de la carne
Además del origen, verifique siempre los detalles de la maduración de la carne. ¿Qué es la maduración de la carne? Este es el período durante el cual la carne se deja reposar para permitir que las enzimas trabajen los músculos haciendo que la carne sea mucho más tierna y digerible.
La carne obviamente necesita reposar a una temperatura controlada, generalmente entre 0 y 4 ° C. La duración de la maduración depende del tipo de carne y la edad. Las carnes rojas necesitan al menos diez días, mientras que las blancas como la ternera tienen un período máximo de maduración de 3 días.
Sigue estos sencillos pasos cada vez que controlas un pedido de carne fresca para tu bar, restaurante o carnicería. Controla la procedencia, el color, la textura y también el sabor, sobre todo cuando empiezas a trabajar con un nuevo proveedor. Si tienes alguna duda o necesitas carne de calidad en Valencia, recuerda que en Discarsa estaremos encantados de asesorarte y proporcionarte siempre la mejor carne para tu negocio. Trabajamos con ganaderías seleccionadas, tenemos almacén frigorífico y sala de despiece, además de una experiencia en la industria cárnica de casi 40 años.